28 noviembre 2004

BELLA CRÓNICA NECROLÓGICA

Ayer Lunes 26, festividad de S. Cayetano, en la Finca de Alto Cerro, sita en Zahara de los Jardines, falleció a los 98 años el benefactor, padre generoso de sus hijos, y porqué no decirlo, multimillonario Ilustrisimo Sr. D. Jose María Sáenz de Castañuelas. Su larga agonía, por penosa, no dejó de ser menos entrañable. Allí estaban su mujer actual, Conchita Heredia, junto a los tres hijastros de nuestro hombre: Miguel, Antonio, Laura y sus respectivas parejas, Isabel, Lucía y Marcos. Tambien no dejaron de asistirle en su lecho de muerte su anterior esposa, Dña María de los Campos Iterrabeuría y los cinco hijos que tuvo durante sus veintisiete años de matrimonio con D. José María, que como ya sabrán, y quizás no sea este el espacio adecuado, se separó cuando conoció en el Molino Rojo a Conchita, cincuenta años menor que él: Lisardo, Tristán, Borja, Helena María y Mercedes, así como sus respectivas parejas e hijos, el más pequeño de los cuales, Tontxito, de diez años de edad, tuvo que recibir asistencia psicológica ante el trance de la despedida de su entrañable abuelo. Tambien estuvieron en el dormitorio del Ilustrísimo Sr., acompañándole en su violenta agonía (dolorosamente expiatoria) sus veintinueve primos y setenta y dos sobrinos, así como sus cuarenta y siete criados, sus siete jardineros, sus dos meretrices, Nicolette y Laure, los veinticinco niños rumanos a los que apadrinó cuando visitó tan lejano país y sus caballos preferidos, Altivo y Pelotudo.
Como no podía ser de otra forma, alrededor de las diez de la noche, D. José María dio su último estertor. Qué duda cabe que murió en la más absoluta soledad.

No hay comentarios: